TAROT SOPHIE: EL SEXO Y LOS SIGNOS
ZODIACALES.
ARIES: El
incendiario veloz
SEDUCCIÓN: Puro ímpetu
Acéptalo: NO puedes seducirles. El signo
más directo y explosivo sólo sabe conquistar y, además, sin andarse con
florituras. Si les asalta el deseo tendrán que “resolverlo” inmediatamente. Si
te apetece algo con ellos no tendrás que ser demasiado sutil. Sonríe, muévete
por la habitación como tú sabes… en cuanto estés a dos metros de distancia de
repente sentirás sus manos recorriendo tu cuerpo y sus labios tan cerca de los
tuyos que apenas podrás decir nada. Y cuando ya estés en sus garras te
sorprenderán con un ¿lo hacemos? Ellos son así, directos al grano.
Recibido su mensaje -alto y claro- sólo
tienes dos opciones. Abofetearle o dejarte llevar por su ímpetu. ¿Te gusta el
sexo salvaje? ¿Te gusta sudar? ¿Quieres gritar de placer? Si la respuesta es
afirmativa acepta su “romántica” proposición, y esta noche arderá la ciudad!!!
EN LA CAMA: Coito, ergo sum
Extrovertidos, lujuriosos y de fuerte
carácter, les gusta dominar la situación. Sin que te des cuenta te habrá
volteado sobre la cama o, mejor, ni os habrá dado tiempo a llegar a ella. El
autobús, el asiento de atrás del coche, un rincón oscuro en unos grandes
almacenes, el ascensor, contra la puerta o sobre la mesa del comedor, su líbido
llega a tal extremo que difícilmente pueden controlar el deseo de fundirse con
su amante. Probará todas las maneras, todos los lugares, con una urgencia que
te estremecerá y antes, mucho antes de lo que te imaginas, habrás alcanzado un
glorioso éxtasis. Si algo bueno tienen los aries es que basta un gesto para
encenderles y que todo su armamento esté preparado para entrar en batalla!!!
Haz la prueba, en medio de una calle atiborrada de gente agárrele de la mano y
dile al oído que te apetece…
FANTASÍAS: Yo, me, mi, conmigo
Los aries pecan de ególatras en el
terreno sexual. Demasiado atentos a sus deseos y necesidades, tendrás que
convertir tu deseo en el suyo. ¿Cómo? En realidad son bastante fáciles de
estimular. ¿Quieres guerra? Provócale paseándote delante suyo como Dios te
trajo al mundo, dile lo que te gustaría que te hiciera, paso por paso, o qué
vas a hacerle cuando os quedéis solos… Su mayor ilusión sería tener cerca todo
lo que pueda saciar sus urgentes apetitos así que, ¿por qué no hacer su sueño
realidad? Una playa desierta donde podáis retozar desnudos las veces que
queráis, unas fresas para calmar el hambre y un baño refrescante en el que
pueda verte “juguetear” con el agua… si sabes provocarle le verás aullando detrás
de ti… sólo déjate atrapar…
TAURO: Un
gourmet en mi cama
SEDUCCIÓN: El imperio de los sentidos
Estamos ante un signo galante, paciente
y tremendamente sensual. Son de pocas palabras pero ni falta que les hace
porque si han decidido que te quieren en su cama, serán capaces de hacerte el
amor con la mirada… Cuida tu ropa interior que te parece tan excitante y
disponte a una larga y sensual seducción en la que los sentidos serán los
protagonistas. No hace falta que le cuentes nada, es mejor que le “sugieras”,
que les mires insistentemente, que les dejes con la miel en los labios….
Cualquier tipo de tacto les excita sobremanera, desde un inocente roce hasta
una caricia llena de intención. A los Tauro les encanta ir despacito para poder
hacerse una idea de todos los placeres que podrán compartir contigo… y ten por
seguro que no se olvidarán de ninguno. ¿Creías que conocías el mundo de los
sentidos? Bienvenido al paraíso de la sensualidad.
EN LA CAMA: Las mil y una noches
Aunque son grandes seductores, les gusta
que tomes la iniciativa y nunca te dirán que no a nada. Les vuelve locos dar
placer y no escatiman en tiempo para lograrlo, así que es el momento de probar
todo aquello que se te había pasado por la cabeza y no te habías atrevido a
hacer. Eso sí, si buscas “uno rapidito” te has equivocado de signo porque antes
de llegar al final el tauro te habrá descubierto un universo de sensaciones que
no habías probado hasta ahora. ¿Puede llevarte al éxtasis sentir una
respiración? ¿o unos mordiscos? ¿o unas hábiles caricias? ¿o escuchar las
palabras exactas? Si quieres saberlo, lígate a un tauro y podrás comprobar
durante horas que el sexo es muuuuucho más de lo que te habían contado!!
FANTASÍAS: El mapa de tu cuerpo
Los tauro son los reyes de los sentidos
y te sabrán agradecer que les regales tiempo y placer. Si hay algo a lo que no
se pueden resistir es al tacto, así que dibuja un mapa del “tesoro” sobre su
cuerpo, tápale los ojos y recorre el camino con tus manos, tu lengua, tu… lo
que quieras. No olvides dejar algún manjar que puedas hacerle llegar de vez en
cuando con tu propia boca. Es posible que ellos estén imaginando que sois más
de uno, que está rendido ante todo un harén de hombres y mujeres que le
acarician, rozan, muerden y besan…. Déjales soñar…. Y asegúrate de que
despiertan en el momento clave!!!!
GÉMINIS: El
explorador insaciable
SEDUCCIÓN: Por la boca muere el pez…
Extrovertidos, sociables, charlatanes e
inquietos. Así son los géminis, y ahí está la clave para conquistarles. Si
consigues retener su atención, “toda” su atención, la cosa va bien. La
conversación es la mejor puerta para entrar en su mundo… y en su cama. Háblale
sin pudor de sexo, cautívale preguntándole si ha probado alguna de las posturas
del kama sutra o explicándole las técnicas del taoísmo. Mientras le camelas con
la palabra puedes acariciarte el cuello o las piernas “distraidamente”. Eso le
hará comprender lo que le espera y su famosa impaciencia le hará encenderse
como un volcán en erupción. Notas cómo aumenta el ritmo de su respiración? Es
el momento!!! Incita su mórbida curiosidad insinuándole que conoces un par de
jueguecitos placenteros que quizás le puedas enseñar y le tendrás revolviendo
en sus bolsillos para encontrar las llaves de casa!!!
EN LA CAMA: Pentatlón horizontal.
Te gustará saber que los géminis saben
hacer más de una cosa a la vez… Sus manos parecen multiplicarse y sus labios
pueden acariciar todo tu cuerpo mientras te cuentan lo que te van a hacer
después… No les vale con lo que han visto hasta ahora, así que ve preparándote
porque acabas de introducirte en el gran circo acróbata del sexo!!! Te
propondrá las ideas más descabelladas y, si le sigues el rollo (con sensatez,
no te vayas a lesionar) te lo habrás ganado de por vida. Una sudorosa noche con
un géminis puede ser inolvidable, ajeno al tiempo te hará llegar a las más
altas cotas de placer por los caminos más insospechados y, cuando creas que vas
a perder la conciencia…. Volverá a empezar!!!
FANTASÍAS: El mirón.
Por encima de todo, les gusta mirar. Si
por ellos fuera, colocarían una webcom en cada alcoba y disfrutarían solos o
acompañados del festín visual. Saca del arcón aquellas películas eróticas que
escondes desde hace tiempo y déjate llevar por la excitación. Pronto te verás
inmersa en una particular versión de cuanto veías en la pantalla. Que no es
suficiente? Ellos aman la libertad y no son celosos, así que cuéntale alguna experiencia
anterior con todo lujo de detalles. La sola idea les encenderá la líbido y el
sentido competitivo porque… con ellos también puedes hacerlo!!!
CÁNCER: El
rey de la imaginación
SEDUCCIÓN: A Dios rogando…
A un cáncer no se le gana con el simple
deseo. Esa es la pauta fundamental que nunca se debe olvidar. Fogosos ellos,
una vez que han superado la timidez, a los cáncer se les seduce diciéndoles
cosas como “quiero ir despacio porque esto me importa”. Acto seguido verás cómo
el cangrejo cerrará sus pinzas sobre ti y te abrumará con toda clase de besos,
abrazos y lametones. Les encanta esa extraña mezcla entre el “tierno buscando
un cómplice” y el “salvaje descubriendo nuevos mundos”, así que arréglatelas
como puedas para hacerle ver lo sensible que eres mientras le arrancas a
mordiscos la ropa… Por ejemplo, si le vas a morder la oreja, procura decirle
antes algo hermoso. Y si, por el contrario, le vas a acariciar inocentemente,
debes mezclarlo con alguna sugerencia calentita mirándole fijamente a los ojos,
porque si hay algo que les excita a los nacidos bajo este signo es la
contradicción. Ya sabes, la técnica de la distracción.
EN LA CAMA: Imaginación al poder.
La clave: dale confianza y verás ante ti
un volcán en plena erupción. Una vez atravesado el caparazón de los cáncer
descubrirás una sexualidad sorprendente. Nada de las posturitas de toda la
vida, que eso ya lo han visto en las pelis. Lo que quieren ellos es jugar, así
que no te equivoques ni un pelo yendo a por el coito de buenas a primeras
porque no volverán a repetir contigo en la vida. Ellos, entiéndelo bien,
quieren divertirse. Y eso significa darle cancha a los prolegómenos y, por
supuesto, a la imaginación. Una historia bien contada, un poco de riesgo en un
lugar medianamente público, unas caricias bien hechas, probar con algún
juguetito por sorpresa… y serás literalmente devorado por su deseo desbordante…
estás preparado?
FANTASÍAS: Átame.
Exhibicionistas no son, para qué nos
vamos a engañar. Eso sí, tú cuéntale al oído que eres un desconocido que se
sentó en el tren a su lado y los verás retorcerse de placer con los ojos bien
cerrados.
No es que no quieran verte, es que lo de
“no saber” les pone. Hazle notar tu aliento en el cuello, bien cerquita de la
nuca, y no dudes en ponerle una venda en los ojos, por aquello de despertar su
imaginación calenturienta. Tampoco es que les vaya el rollo sado, no te
confundas, pero eso de que al cangrejo le rompan el cascarón mientras mira para
otro lado… Mmmm…
LEO: Devórame
otra vez
SEDUCCIÓN: El cazador cazado.
Nos enfrentamos al rey de la selva y
todos sabemos cuáles son sus puntos débiles. Vanidad, control y éxito. A los
Leo les encanta merodear frente a su presa y saber que ELLOS la han cazado, así
que sólo debes saber jugar tus cartas. Una actitud reticente les supondrá un
reto excitante, así que juega con ello. También les encanta que les adulen, no
te cortes en hacerlo y muéstrate sensual y encantador. Cuanto más “bonita” sea
su presa, más entusiasmo pondrán. Estás ante uno de los signos más
desenfrenados, así que en tu mano está dosificar este torrente de pasión. Ellos
creerán que te han conquistado, lo que no saben es que has sido tú quien ha
marcado el ritmo…
EN LA CAMA: Fuego en el monte de Venus.
Una vez que te “has dejado cazar”, los
nacidos bajo este signo te devorarán lentamente. Es más fácil dejarte amar que
amarles, pero no dudes en proponerles algún juego que les saque del clásico
revolcón. Son juguetones por naturaleza y les encanta el preámbulo así que
provoca su deseo hasta el límite soportable y verás cómo se retuercen de
placer, si es que antes no te han agarrado por la cintura y te han hecho
escalar a la cumbre. Eso sí, nunca les vale con uno sólo…. ¿tomaste vitaminas
por la mañana?
En cuanto a los resultados, si algo les caracteriza
es su franqueza. No tardarán dos segundos en decirte si han disfrutado de
verdad y, ve haciéndote a la idea, tu orgasmo no es más que un éxito para
ellos!!!.
FANTASÍAS: Voayeur de sí mismo.
Ha quedado claro que los Leo están
encantados de haberse conocido, no? Pues dos más dos son cuatro; llévatelo al
espejo más cercano y le darás el gustazo de mirarte y mirarse mientras
disfrutáis. A ellos las cosas “les entran por los ojos” y se revolverán en su
trono si les regalas un buen streptease… nada complace más al rey de la selva
que mirar por última vez a su presa antes de devorarla. Otra de las grandes
ventajas de estos amantes tan “activos” es que les puedes pedir que te hagan
todo lo que se te ocurra, que ellos tendrán su particular ego-orgasmo dándote
placer. Aprovecha la ocasión!!!
VIRGO: La
pasión dormida
SEDUCCIÓN: El pulpo distraído
Los nacidos bajo este signo quieren ser
seducidos sin sentirse cazados. Mejor espera a que se muestren interesados y
despliega todos tus encantos para que se intriguen. Si quieres un primer
contacto físico, aprovecha un concierto, el vaivén del autobús o abrázales
mientras les enseñas a volar una cometa (aunque no tengas ni idea de cómo
hacerlo). Cuando hayan empezado a salivar sintiendo el calorcito y la cercanía
de tus labios aprovecha para retirarte, eso les vuelve locos. Y si quieres algo
más, ya puedes ir preparando la típica cena con alfombra y chimenea. Ahora los
dos sabéis qué será lo que sigue pero les tendrás observando cómo logras llegar
a tu objetivo. Una pista: su pecho es extremadamente sensible…
EN LA CAMA: Placeres empíricos
Vagos. Ellos son fundamentalmente vagos.
Y agradecerán que lleves la iniciativa hasta que su ardor les haga salir de su
letargo. Entonces querrán jugar y te pedirán cosas de las que ni habías oído
hablar. Es un signo muy documentado, y te ha estado esperando para
experimentarlo TODO. Te sorprenderán cambiando de actitud. A veces parecen
estar aburridos y tus manos y tu lengua tendrán que “animarlos” con una mezcla
de suavidad y salvajismo. Otras, no te dejarán ni moverte porque querrán
“descubrirlo todo sobre ti”. Acéptalo, nunca sabrás con cuál de sus dos
personalidades te acostarás esta noche y cuanto más flexible seas más podréis
disfrutar. Eso sí, ¿tienes algún caprichito sexual? Pues estás de suerte; hoy
lo probarás.
FANTASÍAS: Un dulce despertar
Limpitos ellos y fundidos con la
naturaleza, no hay nada que les guste más que sentir la brisa sobre su cuerpo,
el calor en la piel o escuchar el mar mientras hacen el amor. Puedes “bañarles”
tú mismo sin olvidarte ni un solo centímetro de su piel –da muy buenos
resultados-, aunque en realidad nada les gustaría más que quedarse dormidos
sobre el césped y ser despertados muy lentamente por el cosquilleo de la
hierba, el calor de otra piel, un susurro al oído y la humedad de otra lengua…
Una vez que sean presas del placer incontrolado entre la vigilia y el sueño les
tendrás totalmente entregados a la pasión más sensual.
LIBRA: El
depredador inteligente
SEDUCCIÓN: Ante la duda…
¿Cómo se seduce a “un reloj”? Exacto;
con precisión. Los libra son tan ordenaditos que si te distraes en el orden de
los pasos del cortejo te tirarán a la basura. Son perseverantes con sus presas,
aunque siempre disimulan sus deseos, así que te creerás que eres tú quien los
seduce… ni de coña. La mejor táctica es mostrarte sutil pero firme; si quieres
algo, hazlo y, sobre todo, no les des alternativa porque su incapacidad para
decidirse te tendrán en vilo toda la noche. Embáucales con el ambiente, la
cena, las velas… y cuando les tengas rodeados no flaquees en tus gestos porque
sino te verás repitiendo todo desde el principio!!! Y a ellos les gustan tanto
los principios…
EN LA CAMA: La hora del sexo
Si por los Libra fuera cronometrarían el
acto sexual y lo fijarían como una actividad más dentro de su agenda semanal.
Todo un reto, sí, porque si consigues que subrayen esa actividad con un
rotulador habrás conseguido tenerlos a tus pies. Tienes total libertad para
hacer lo que quieras porque aceptarán tus propuestas y si la luna te sonríe te
sorprenderán con uno de esos modelitos que tanto te excitan, se desnudarán
lentamente y se moverán despacio esperando a que los devores. Lo suyo no es una
pasión desenfrenada pero cuando un libra se entrega es capaz de hacer el amor
hasta que caiga rendido. ¿Tomaste vitaminas?
FANTASÍAS: A sus órdenes
A estos falsos tímidos les vuelven locos
las relaciones de poder. Sueñan con dar órdenes a su partener o someterse
obedientes a sus deseos. Incluso un buen cachete les hará gemir de placer. Eso
sí, debes saber cuándo dárselo porque un solo error te dejará marcada una
bofetada en la cara para siempre y desnudo a la intemperie en medio de la
noche!
Ellos nunca te lo dirán, pero si ves un
extraño brillo en sus ojos ofrécete como su esclavo del amor y te descubrirán
un universo paralelo en el que los fríos libras arden como un volcán. ¿Con
quién te creías que estabas jugando?
ESCORPIO: El
hipnotizador salvaje
SEDUCCIÓN: Misterios por resolver.
Te enfrentas al signo más sexual del
zodiaco y antes de que te plantees cómo conquistarlo ya te habrá desnudado con
su carismática mirada y se habrá acercado sigilosamente a ti. Podrá parecer que
no le interesas, pero es sólo una de sus tácticas. Tienden a relamerse antes de
hacer nada, ya sabes, como el perro de Paulov, y les vuelve locos la intriga
así que lo mejor que puedes hacer es recurrir a tu ingenio para que te
“saboree” primero con la imaginación. Un toque de insinuación física para que
le desespere saber cómo es tu ropa interior, una dosis de tonteo con aire
autosuficiente (si utilizas a un tercero en discordia sus celos activarán
inmediatamente el deseo de poseerte) o un beso a medias seguido de un “ahora
vuelvo” son armas infalibles para acaparar la atención del ardiente escorpión.
Si consigues resistir a su hipnosis sexual y le das alguna que otra pista sobre
lo que puede ocurrir esa misma noche… le tendrás dispuesto a investigar todos
los secretos que encierra tu cuerpo…
EN LA CAMA: Duelo de titanes
Te creías que ya estaba todo ganado,
verdad? Pues ahora comienza el verdadero combate –absténganse tímidos-. Para
los nacidos bajo este signo el sexo es absolutamente fundamental, una manera de
comunicarse y de dejar bien clarito cuál es su lugar en el mundo. Querrán
controlar la situación y a la vez jugar con el “quiero y no puedo”, lo que se
traduce en un constante toma y daca salvaje que pasará por más de diez
posturas, cuarenta proposiciones indecentes, tres o cuatro juguetitos y algún
escenario surrealista. ¿Quieres volverle completamente loco? Accede a sus
fantasías, pero no le dejes hacer siempre lo que quiera. Es más, déjale bien
claro –a ser posible con tu cuerpo, tus dientes y esas uñitas díscolas-, que
“tú también mandas”. Qué, ¿no viste Instinto Básico?
FANTASÍAS: La fiera de mi niña.
Nunca pierdas de vista que peligro y
misterio son dos conceptos que, digamos, excitan a un escorpio. Puedes
llevártelo a algún lugar histórico, al escenario de un crimen o a cualquier
paraje exótico que le haga imaginar otras vidas. Y hablando de imaginar otras
vidas, si sabes narrar no dudes en contarle al oído cómo os lo montáis en una
orgía con aroma a sándalo mientras le pellizcas suavemente o guías sus manos
por tu cuerpo.
En cuanto al peligro, si no eres amigo
de las armas afiladas (casi mejor), siempre podrás atarle las manos o ponerle
una mordaza para juguetear a tus anchas. Luchará tenazmente para recuperar el
poder y cuando lo consiga es probable que se coloque sobre ti a cuatro patas y
te inmovilice primero para “devorarte después”… ¿seguro que sabes dónde te has
metido?
SAGITARIO: El
embaucador complaciente
SEDUCCIÓN: Los reyes del coqueteo.
Sólo dos cosas: riéle las gracias y
hazte de rogar. Así de sencillos son los sagitario. Directos en el trato –y en
el acercamiento sexual-, con gran sentido del humor y cierta tendencia a meter
la pata. En cuanto te fijes en ellos los tendrás merodeando a tu alrededor.
Disfrutan de la persecución y prefieren conquistar que ser conquistados, así
que tendrás que jugar al perro y al gato, incluso cuando ya estéis sentados en
el sofá. Hazle ver lo que viene después, pero no te olvides de dejarle con la
miel en los labios. Retrasar el deseo les volverá locos y podrá parecer que de
un momento a otro saltará sobre la mesa y se pondrá a aullar (espontaneidad no
les falta) pero si sabes jugar tus cartas y ejercitas el coqueteo será sobre ti
sobre quien salte. Literalmente.
EN LA CAMA: Monólogos de la vagina…
Te sorprenderás mezclando carcajadas con
esos otros sonidos. Si te gustan las emociones y tienes imaginación estás de
suerte, porque ellos, generosos, harán cualquier cosa por complacerte.
Aprovecha la ocasión, ábrete… y pide por esa boquita todo aquello que siempre
soñaste… con ellos no caben los juicios de valor.
Tampoco tú deberás tenerlos porque te
encuentras ante el signo más original, capaz de retransmitirte todo cuanto
hacéis mientras pone muecas y te encuentra esos puntos que hasta ahora sólo tú
conocías. Después de una noche con un sagitario no quedará ni un solo
centímetro de cuerpo fuera de su alcance…
FANTASÍAS: El club del gourmet
Además de juguetones y risueños, los
nacidos bajo este signo son hipersensibles a las caricias. Los pequeños gestos
sugerentes les ponen a cien así que, ¿por qué no dilatar el deseo un poquito
más? Cubre tu cuerpo de frutas, chocolate, miel… lo que más le guste y
adviértele que no puede dejarse nada en el plato o se quedará castigado sin
postre… Ellos son de buen comer y este suculento recorrido quedará grabado en
su memoria para los restos. Una vez que haya “saciado su apetito” conquistador
tendrá que prestarse al mismo juego y, no lo dudes, ahí empieza lo bueno!!!
CAPRICORNIO: Un
lobo con piel de cordero
SEDUCCIÓN: Fuego helado
Hemos topado con el hueso más duro de
roer de todo el zodiaco. Fríos, distantes y calculadores, estos cubitos de
hielo con patas, que guardan uno de los mayores fuegos sexuales, se harán de
rogar convirtiéndose en el objeto de seducción mientras te miran de arriba
abajo. ¿Sabes moverte? Camina haciéndole ver lo que se puede perder. Derrítele
con una buena conversación mientras le enseñas el escote o la fuerza de las
manos… y asegúrale que no pretendes sólo sexo (aunque sea mentira cochina).
Tendrás que currártelo con velitas, aroma a incienso y buenas vistas de la
ciudad (son muy muy tradicionales) pero siempre tienes la opción B: si
consigues ser absolutamente descarado y no le das opción a reaccionar le
tendrás en la cama arrancándote la ropa sin que se haya dado cuenta de cómo
llegó hasta allí.
EN LA CAMA: Un poquito más
Son los reyes del deseo reprimido.
Aguantan hasta que les duela, pero una vez que explotan cuentan con un carisma
sexual fuera de lo común. Lo suyo es el sexo salvaje, constante y muy, muy
frecuente. ¿Sabes esos tarritos que pone “agítese antes de usar”? Pues lo
mismo. Juega a tocarle y tocarte, algún lametón, alguna sugerencia al oído,
pero sin dejar que te haga nada. Si hace falta átale. Cuándo vuelva a tener
movilidad comprenderás por qué valió la pena todo el esfuerzo anterior.
De ellos puedes esperar arañazos,
mordiscos, lucha de poder… una noche interminable en la que te preguntarás
entre gemidos y bañado en sudor, de dónde sacó esta desvergüenza aquel modosito
al que te dirigiste hace unas horas.
Ah, y no te molestes en hacer la cama
después. Volverás a utilizarla.
FANTASÍAS: Vamos los dos en compañía…
Cuando el capricornio se desinhibe se
convierte en un devorador insaciable, hasta el punto de que, en su fuero más
interno y, aunque no se atreva a decirlo, su gran sueño es poder devorar a más
de uno y una a la vez. Sí señor, capricornio guarda en su interior al rey de
las orgías. Nada le gustaría más que encontrarse en un harén donde, por orden,
claro, fueran pasado entre sus manos y sus piernas, toda serie de cuerpos
escultóricos en una noche interminable. ¿Quieres jugar? Llévatelo a un pase de
modelos o a una calle concurrida y susúrrale al oído qué podría hacer con cada
uno y una de los que se cruzan por su mirada mientras guías su mano por tu
cuerpo –discretamente-. Le habrás encendido tanto que no será capaz de
aguantarse hasta llegar a casa… Corre, meteros en el baño de un bar!!!
ACUARIO: El
coleccionista de sensaciones
SEDUCCIÓN: Disculpa, ¿dijiste sexo?
Estos extraterrestres del zodiaco, que
bien podrían estar de paso en la Tierra, son los eternos observadores, los
científicos, los innovadores, y tendrás que asumir su carácter distante si les
quieres conquistar. Lo primero es hacerse notar, que se fije en ti como lo hace
el resto de la reunión. Una vez que has dado muestra de tu presencia le
ofrecerás un primer plato para ellos suculento: el intelecto. Hazle preguntas
interesantes, habla sobre cualquier tema actual y, cuando hayas despertado su
“libido mental” ofrécele el “postre” sin dilación. A ellos les encanta que seas
directo y, aunque se muestren reticentes al principio, sucumbirán a tu
seguridad.
Con los acuario hay que cocinar a fuego
lento pero cuando estén en su momento álgido descubrirás que son los grandes
exploradores del placer.
EN LA CAMA: El placer tranquilo.
Sensaciones. Eso es lo que buscan, más
que cualquier matiz sentimental. Les verás cerrar los ojos y dejarse llevar
pacíficamente hasta que consideren que han llegado a donde se proponían… pero
no te muestres sólo complaciente. Si hay algo que un acuario valora es que su
amante exija el derecho al placer y pida abiertamente lo que desea. Les encanta
cualquier novedad: posturas, prácticas de otras culturas, olores, sabores,
juguetes… Puede que no sean los reyes de la pasión pero si dispones de, al
menos, un par de horas, disfrutar del sexo con un acuario te garantizará un
universo de placer que nunca antes habías imaginado. Eso sí, no te extrañe que
al terminar se quede mirando al cielo y te explique la historia de la
constelación que tenéis justo encima… es lo que tienen…
FANTASÍAS: El coleccionista.
¿Distante? ¿Intelectual? Útilízalo!!!
Seguramente los nacidos bajo este signo están deseosos de encontrar quien les
convierta el sexo en una cuestión científica. Dile que cierre los ojos y que
intente capturar todas las sensaciones para luego contártelas. Le tendrás
concentradito y a tu merced todo el tiempo que quieras. Luego rétale a que te
haga sentir exactamente lo mismo y no verás a nadie tan dispuesto a llevarte al
clímax como tu nuevo amante.
La provocación dialéctica también
funciona. Comienza una buena discusión política con tus mejores galas. Aún no
está comprobado cuál de los dos elementos es el que desata su pasión… pero el
resultado es lo que cuenta, no?
PISCIS: Un
baño de placer
SEDUCCIÓN: Entre algodones.
Es muy sencillo. Ellos ponen el cebo y
con su fascinación te harán picar sin dudarlo. ¿Recuerdas esos ritos de
apareamiento que se ven en los documentales de animales? Es el momento de
aplicarlos. Son sensibles, imaginativos y muy románticos, así que echa mano de
una cena íntima, un buen vino (son muy vulnerables al alcohol) y, con mucha
sutileza, cuéntales alguna historia triste. Les habrás seducido y, sin que te
dé tiempo a hacerle proposiciones indecentes, les tendrás acariciándote con una
mezcla de ternura y deseo. Es el momento de mirarles fijamente a los ojos y
pedirles en plan místico que te regalen la noche. Dicho así, tan bonito, les
parecerá irresistible. Aprovecha para comerles la boca… ¿Quién ha seducido a
quién?
EN LA CAMA: Un universo por descubrir.
La realidad no forma parte de su
delicado universo. Son escurridizos como los peces y lo mismo se te entregan
sin restricciones que se muestran fríos y ausentes. Tienen una sensualidad
fuera de lo común, aunque parecen de porcelana, así que tendrás que esforzarte
en despertar su pasión recorriendo todo su cuerpo, pero no tan “sutilmente” que
desconecten. Con ellos es mejor provocar despacio hasta que pidan más. Una
mezcla de sensibilidad y rollito salvaje les mantendrá atentos todo el tiempo,
con ganas de averiguar que será lo próximo… Te verás inmerso en un nuevo
lenguaje corporal en el que ellos juegan con tanta imaginación que ni siquiera
podrás contárselo luego a los amigos ¿qué fue exactamente lo que te hizo?
FANTASÍAS: Como pez en el agua.
¿Tienes piscina privada? ¿Una bañera
considerable? ¿Un hielito a mano? Esta es la tuya. Ya sabes que a ellos las
sensaciones húmedas les hacen sentirse “especialmente bien” así que conviértete
en agua por un ratito y querrán que formes parte de su cuerpo, en su más amplio
sentido. Prueba con un jacuzzi o unos baños árabes. Puede que al principio
sientan pudor, por la cosa de lugar público, pero si ya sabes donde tienen sus
puntos flacos conseguirás que se olviden de dónde están y que te lo hagan
olvidar a ti…. Y sí, saldréis agotados y arrugaditos como uvas pasas, pero a
partir de ahí cada vez que se den una ducha cerrarán los ojos para recordar que
tú eres quien le está “mojando”….
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